Hoy nos hemos dado un paseo por el Parque Arqueológico Natural de la Campa Torres, origen de la ciudad de Gijón y emblema, en Asturias, de nuestras raíces celtas y romanas.
Entre los elementos más singulares de este yacimiento destacan sus pozos de agua excavados en el terreno y forrados con bloques de cuarcita y, a veces, caliza. Pueden tener profundidades de unos 4 metros hasta alcanzar el agua de las capas subterráneas y son características sus escaleras de acceso, conservando veintiún siglos después su manantial original de agua.
De los restos arqueológicos hallados se han reproducido dos viviendas, una romana y otra circular, que sigue la tradición indígena.
El museo del castro (emplazado en un antiguo baluarte artillero de principios del siglo XX) muestra la historia del poblado desde sus orígenes hasta la época romana, exhibiendo objetos localizados en las excavaciones así como textos, reproducciones e imágenes ilustrativas. La visita se completa con un audiovisual sobre la cultura castreña.